Este libro desarrolla de manera detallada la teoría de Charles Sanders Peirce (1839-1914) en torno de los signos. Trata de un autor que es uno de los fundadores de la filosofía norteamericana y que inaugura una nueva disciplina, la semiótica. Fue una personalidad compleja y contradictoria que ejerció una influencia imborrable en el destino posterior de la disciplina que fundó. Su teoría de los signos es hoy empleada comúnmente. La noción de ícono, índice y símbolo constituye una referencia reiterada aunque no siempre se conocen sus fundamentos y supuestos. Su clasificación de las ciencias incluida la semiótica supone una nueva perspectiva en torno de la organización del conocimiento y desencadena visiones que aún hoy se debaten y confrontan. El pragmatismo, la filosofía de la que se sentía fundador, inaugura una nueva forma de concebir el significado más como resultado de la acción de los signos y menos como el resultado de su actividad intrínseca. La semiótica ha calado hondo en el desarrollo del pensamiento contemporáneo. Ninguna disciplina científica ha dejado de reconocer la importancia de su irrupción. El estudio de la cultura contemporánea, del arte, del análisis del discurso, de la teoría de la argumentación, del psicoanálisis, por citar sólo los ámbitos más obvios, están entrelazados de manera inevitable al destino de la semiótica. La monumental obra de Peirce no fue publicada en vida y todavía se está realizando la tarea de clasificación, interpretación y publicación. Este libro pretende ser una síntesis breve pero acabada de una labor que se sigue procesando.