Kara, la hija más amada del cóndor-rey Luracatao, echa de menos a su padre.Tiene prohibido alejarse del nido. Ni hablar de dejarse ver por los hombres, cuyas balas amenazan la vida en los parajes andinos. Ahora Kara enfrenta un gran desafío. Debe aprender a volar. Para lograrlo, precisará de todo sucoraje y su fe.

Esta es una historia que, metafóricamente, trabaja la superación de los prejuicios, el valor de la amistad, la confianza y la fe. Visibiliza el proceso de crecer y todo aquello que implica salir del nido y tomar decisiones propias. Nos muestra que estamos llamados a vivir en armonía junto con todas las criaturas de la Tierra, porque somos parte del gran tapiz de la vida, cuya diversidad y colores están íntimamente entrelazados.